Largas filas cuando Venezuela arrancó con una refinería de petróleo

Venezuela tiene solo una refinería de gasolina en funcionamiento mientras lucha por reparar dos plantas clave, creando una escasez tan grave que los conductores y camioneros hacen cola durante horas, incluso días, para obtener combustible.

Una unidad de producción de gasolina en la refinería de Puerto La Cruz, que representa solo el 14 por ciento de la capacidad de refinación de gas de Venezuela, es la única que quedó en funcionamiento en el país después de que los problemas de bombas y compresores cerraron las refinerías de Cardón y Amuay la semana pasada y los intentos de reparación fracasaron, según personas familiarizadas con el asunto que pidieron no ser identificadas porque la información no es pública.

A pesar de contener las reservas de petróleo más grandes del mundo y una de las plantas de refinación más grandes de América del Sur, Venezuela ha luchado durante años para satisfacer la demanda interna de 120.000 barriles por día, situación que se ha agravado con las sanciones de Estados Unidos. La escasez de gasolina es común, y el país experimenta regularmente caídas de capacidad. Actualmente, la capacidad ha disminuido en un 86%.

Ambas refinerías afectadas procesaban crudo el miércoles, pero no producían combustible. La gasolina solo ha estado ampliamente disponible en Caracas, donde el gobierno garantiza el suministro oportuno por temor a las protestas. Cuando el país enfrentó una escasez tan severa en 2020, desplegó soldados para proteger las estaciones de servicio.

Los representantes de la petrolera estatal PDVSA y los de las refinerías no respondieron a las solicitudes de comentarios. PDVSA pretende comenzar a producir gasolina el jueves, según una de las personas.

Desde 2020, PDVSA ha estado desviando gasolina de su planta en el este de Puerto La Cruz a otras partes del país, aunque tiene como objetivo alimentar la demanda local. La capacidad combinada de las cinco refinerías del país es de 1,28 millones de barriles por día.